El 2020 es un año lleno de cambios tanto a nivel global como en concreto en el mundo profesional. Nuevos negocios, negocios en quiebra, necesidad de adaptarse a la tan mencionada «nueva normalidad» y mucha incertidumbre.
Cambios y etiquetas electrónicas son dos conceptos que van perfectamente de la mano y que, sobre todo en sectores como el retail o la hostelería, pueden suponer toda una revolución que ayude a superar esta crisis.
Cambios y etiquetas electrónicas
Si sueles leer este blog ya sabrás de sobra los beneficios de las etiquetas electrónicas (y si no te dejamos este post en el blog para que los conozcas). Sin embargo, muchas empresas todavía son reticentes a implantarlas por miedo al cambio o a la digitalización.
¿En qué pueden relacionarse cambios y etiquetas electrónicas? Las etiquetas electrónicas aceleran mucho los procesos de gestión de un comercio o cualquier tipo de negocio pero, más allá de eso, colaboran en otros muchos aspectos.
Según un estudio, en Estados Unidos casi la mitad de los trabajadores del sector del retail tienen más de 55 años. En España el caso es similar y la población envejecida hace que muchos de los trabajadores se sitúen alrededor de esa edad. Además, la situación vivida recientemente ha influido en la inestabilidad del sector con más bajas por enfermedad y despidos.
Las etiquetas electrónicas son un buen aliado para paliar esta situación ya que la automatización de procesos de cambio de precio y de información colaborará en hacer frente a plantillas reducidas o reubicadas. La demanda ha aumentado (sobre todo en los sectores de alimentación y gran consumo) pero también lo ha hecho la vulnerabilidad de los trabajadores.
Estos cambios y etiquetas electrónicas simplificarán los procesos de adaptación y formación al contratar a una persona y ayudarán a flexibilizar la distribución del personal en caso de necesidades de readaptación.
De esta forma se automatizan procesos y se flexibilizan las tareas de cada empleado. Así será mucho más fácil reubicar al personal atendiendo a las diferentes situaciones que puedan venir en el futuro.
Otro cambio importante que viene en los próximos meses y que ya estamos observando son nuevas tendencias de compra ampliadas a todo el público. Una de ellas, por ejemplo, es el click and collect.
Son cada vez más comercios y clientes los que se adaptan a las novedades y incluyen este tipo de compra en sus tiendas. Para poder incluir el click and collect en tu modelo de negocio sin que suponga un estorbo a la rutina diaria de la plantilla las etiquetas electrónicas son el perfecto aliado. La posibilidad de geolocalización y a las luces LED indicadoras facilitarán el proceso y la sencillez de uso permitirá escalar su eficacia incluso con una plantilla inexperta o reducida.
La lucha constante con el comercio digital
El comercio digital sigue ganando terreno y su crecimiento se ha visto multiplicado por la pandemia. El sector del retail físico sigue en una lucha constante contra un comercio digital cada vez más extendido. Para poder competir desde una posición de igualdad se debe tener claro que el comercio electrónico nace con una visión digital completa.
Esta visión digital desde el minuto cero ayuda a tomae las decisiones adecuadas respecto a la digitalización también desde el inicio. Sin embargo, los comercios físicos, que son más tradicionales, deben adaptarse y aplicar soluciones escalables, automatizadas y digitales cuanto antes si quieren poder ganar esta carrera de fondo que es la venta al por menor.